En la selva tenemos
muchas frutas”
“En Lima sólo
conocían el aguaje”, pero el éxito de Fruta y Café en Mistura 2012 fue tal que logró
vender más de 11 mil porciones de helados orgánicos. Su propietaria, María Elena
Achuy, afirma que en esta feria gastronómica, los visitantes se aventuraron a
degustar nuevas experiencias con frutas cien por ciento originarias de la
selva. La señora Achuy, de padres orientales pero nacida en Tarapoto, estudió
Ingeniería Forestal y de Industrias Alimentarias, pero antes de ser empresaria
fue docente. Dice que hace 15 años no prueba un helado que tenga
ingredientes sintéticos.
Por: Viviana Hernández
Diario Hoy- Tarapoto
¿Cómo te iniciaste en
el mundo de los helados?
Mi padre fue uno de los pioneros en cuanto a los helados en Tarapoto y
desde muy niña le ayudaba en una pequeña heladería que era de la familia. Él, a
cambio, me daba muy buenas propinas. Así me di cuenta que en nuestra ciudad las
frutas se desperdiciaban demasiado. Eso me daba pena y dije algún día lograré
convertir toda esta deliciosa fruta en helado.
¿Hace cuantos años
nació Fruta y Café?
Tenemos 5 años. Nace en una etapa en la que mi esposo y yo no sabíamos
qué empresa montar. Así que ambos, luego de recorrer el mundo y aprendiendo más
de helados y postres, dijimos: hagamos helados pero con más calidad para que no
afecte la salud de las personas; sin químicos, solo fruta, porque estas
contienen su propia azúcar, esencia, colorante, acidez y agua. Desde entonces
mis helados son preparados de forma artesanal y a los turistas les encanta.
¿Por qué aquí (en tu
local) no hay televisores ni cuadros como en otras heladerías?
Porque queremos que la gente venga y converse con la persona que lo
acompaña, que se relaje y asimile lo que esta ingiriendo. Nuestra misión es ver
a nuestros clientes con buena salud física y emocional.
Fruta y Café participó
en Mistura, ¿qué tal la experiencia?
Aprovecho en agradecer a doña Elia García de Reátegui, gracias a ella
fue posible que lleguemos a Mistura. Sin duda una experiencia maravillosa,
hicimos un inmenso trabajo por nuestra región al dar a conocer nuestras
bondades naturales. Lo que más pena me dio fue que la gente solo conocía el
aguaje cuando en la selva tenemos muchas frutas.
¿Cuál fue el sabor
que más sensación causó en la feria?
Increíblemente la shica-shica, la gente me preguntaba ¿esto se come? Y
yo me encargaba de explicarles con mucha paciencia que sí. Luego le siguió el
humarí, cacao, pomarrosa. Al final todo voló. Vendimos más de 11 mil porciones.
¿Alguna anécdota?
Hubo un intercambio de palabras con un grupo de chilenos que llegó a
Mistura asegurando que la shica-shica era chilena y no es así.
¿Y es cierto que tú
misma siembras la fruta para producir tus helados?
Sí. Mi esposo, a quien amo y sin él Marielena no sería nada, es el
encargado de cultivar las frutas. Él tiene mucha paciencia para eso.
¿Cuál es el secretito
para que los helados de Fruta y Café sean agradables sin usar
químicos?
Uso la fruta con respeto, es decir sin mezclarla con canela, clavo de
olor o vainilla.
¿Cuál es tu debilidad
como empresaria?
La falta de información. Estamos acostumbrados a la cantidad y no
calidad. Preferimos una bola inmensa de grasa antes que una porción pequeña de
pura fruta. Yo creo que los padres debemos informar, enseñar a los hijos desde
pequeños qué debemos consumir y qué no, qué les va a enfermar y qué les hará fuerte.
¿Y tu fortaleza?
Difundo lo bueno que existe en San Martín. Te cuento que en Lima no
conocen ni el cacao y gracias a nuestra presencia en Mistura muchos aprendieron
a disfrutar de las deliciosas frutas de la selva en helado y también apreciaron
por primera vez las frutas frescas, porque las llevamos.
¿El mayor tropiezo
como empresaria?
En estos 5 años los únicos tropiezos que hemos tenido es debido a
Electro Oriente que nos corta la energía de un momento a otro y como mis
helados no usan estabilizantes ni persevantes entonces toda la producción se va
al agua.
¿Que meta tienes como
empresaria?
Sin duda exportar mis helados de tamarindo, pijuayo, cocona,
shica-shica, indano y de todos los frutos de la selva.
¿Qué opinas de
heladerías como Anonas, La Muyuna y otras que existen en la ciudad?
Son opciones, si a muchos les gusta ese tipo de helados ahí están para
que elijan y sientan la diferencia, tal vez prefieren un helado más cremoso y
sale así por la manteca o la crema chantilly que utilizan.
¿Pero son orgánicos
al 100%? ¿Ha comprobado esto?
En realidad no lo sé, no te podría decir, no es ético hablar de mis
colegas. Mi padre, quien fue uno de los fundadores de La Muyuna, me enseñó a no
hablar mal o bien de la competencia, porque no se gana nada.